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real jaén | la crónica

Regalos que cuestan tres puntos

Regalos que cuestan tres puntos
/ AGENCIA LOF
  • El Real Jaén, muy impreciso a la hora de sacar el balón jugado, cae en su visita al feudo del Sevilla Atlético

Toca aprender de los errores propios para no estar condenado a repetirlos en un futuro cercano. Si la máxima de que nadie escarmienta en cabeza ajena tiene algo de veracidad, el Real Jaén sufrió ayer un correctivo lo suficientemente contundente como para no hacer más concesiones en todo lo que queda de campeonato liguero. Los blancos pagaron un alto precio por las malas decisiones de sus peloteros a la hora de sacar el esférico jugado desde la primera línea. Tres puntos en el zurrón sevillista y primer varapalo serio de la temporada liguera.

El Sevilla Atlético aprovechó la primera ocasión que tuvo, gentileza de un generoso Real Jaén, que por momentos se asemejó a una ONG del pase al rival, para adelantarse en el marcador. Y para matar el partido le bastó otro presente en la recta final del choque, cuando mejor estaban siendo las prestaciones de los jienenses. Sin duda, fue un auténtico quebradero de cabeza sacar el balón jugado desde atrás.

Gonzalo Arconada apostó por el mismo once que en el debut liguero derrotó a la Balompédica Linense. Pero con suerte bien distinta. Y eso que la primera acción de peligro fue para los jienenses. Sergio Molina, a los dos minutos de juego, lo intentó con un disparo desde la frontal, sin fortuna.

El Real Jaén está en construcción. Es obvio. Pero no puede aplazar mucho más en el tiempo la corrección de los errores originados en las numerosas imprecisiones en los pases en su propio campo. La apuesta es clara y decidida por el esférico. Por su posesión y por iniciar las acciones ofensivas desde atrás. Durante el primer round no funcionó la conexión entre las diferentes líneas. Los centrocampistas, Sutil y Pablo Ortiz, sufrían para conectar tanto con la zaga como con los peloteros más adelantados.

El Sevilla Atlético golpeó primero y muy pronto. Ivi firmó el uno a cero a los cinco minutos de juego. Marcó tras aprovecharse de un error del meta Adri, para ser justos, el único en todo el partido.

Pasaban los minutos y el Real Jaén no conseguía inquietar al filial sevillista. Un disparo flojo protagonizado por el capitán Santi Villa fue de lo poco a destacar. Emery, entrenador del primer equipo local, estaba viendo desde las gradas una cómoda victoria de sus pupilos. Incluso Borja Lasso tuvo el segundo en un lanzamiento que el meta Adri despejó en primera instancia y que acabó en el palo de su portería. Era el minuto 26 del choque.

Ivi estaba volviendo loca a una imprecisa defensa jienense. Mientras, el escaso bagaje ofensivo del Real Jaén pasaba por un intento lejano, sin mucha convicción, del portugués Nuno Silva que se marchó desviado.

El Real Jaén tocaba y tocaba, pero los de Diego Martínez aprovechaban su velocidad para bordear un acierto con tintes definitivos por mucho que restaba tela que cortar.

En el segundo tiempo, Arconada dio entrada a Sergio Cala en sustitución de Nuno Silva. Buscaba el banquillero jienense ganar la partida que se había perdido en los primeros 45 minutos en el centro del campo.

Idéntico guión

La trama no cambió en este segundo acto. La puesta en escena del Real Jaén seguía siendo correcta, pero hacía aguas por los continuos presentes que realizaba a su rival. En el enésimo regalo blanco Carrillo estuvo cerca de ampliar el roto.

El capitán, Santi Villa, centenario ayer con el Real Jaén, cazó un mal despeje de Carmona, pero su disparo se marchó desviado. Corría el minuto 63 y Gonzalo Arconada decidió cambiar su dibujo sobre el terreno de juego y pasar a jugar con dos delanteros. Hugo Díaz sustituyó a un Paco Sutil que demostró no sentirse cómodo en la posición de medio centro.

Adri, que salvando el borrón del uno a cero estuvo perfecto, se lució para evitar el dos a cero en una jugada iniciada, no podía ser de otra forma, en una imprecisión de los jienenses. A esta acción le siguieron los mejores minutos del Real Jaén en el partido. Vitu se sacó de la chistera una asistencia que no encontró rematador.

El Real Jaén entró en los últimos veinte minutos de juego sin haber protagonizado ni un solo disparo entre los tres palos de la portería rival. Un dato para el análisis reflexivo y la preocupación moderada.

Vitu protagonizó la más clara. Aprovechó un pase en profundidad para apurar hasta la línea de fondo y forzar un saque de esquina que acabó en otra acción que llevó la inquietud a la zaga de un Sevilla Atlético que empezaba a sufrir por vez primera en el duelo.

El bloque local comenzaba a acusar el cansancio físico y las altas temperaturas de la capital hispalense. A los jienenses se les veía algo más frescos. Un motivo que invitaba, erróneamente, al optimismo.

Tuvo el empate Hugo Díaz en el minuto 84. Centro medido de Sergio Cala y el delantero blanco, completamente solo en el área, la manda fuera de cabeza.

Pero el Real Jaén murió fiel a su filosofía de ser generoso con el rival. Antonio Moreno se la da a Matos, en un pase incomprensible al centro desde el lateral, y el jugador del Sevilla Atlético cede a Curro para que firme el dos a cero.

Que nadie se alarme, porque todavía es muy pronto, pero el próximo fin de semana toca otro filial en el coliseo jienense. El Almería B de Miguel Rivera. El cupo de errores permitidos se completó en Sevilla.