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Una vida de color blanco

Juan Antonio Águila en su casa rodeado de artículos relacionados con el Real Jaén
Juan Antonio Águila en su casa rodeado de artículos relacionados con el Real Jaén / IDEAL
  • Juan Antonio Águila pone fin a su colección de 23 años del club de sus amores, con un museo en su casa de cientos de artículos

Posiblemente sea la suya la mayor colección del Real Jaén de los últimos tiempos en manos de un particular. Centenares de recortes de prensa, fotografías, revistas o camisetas regaladas por los propios jugadores de las últimas décadas. «Ha habido gente que me ha querido comprar alguna camiseta y me han ofrecido bastante y ni me lo he planteado», advierte Juan Antonio Águila (Villadompardo, 1973), que después de veintitrés años entregado a hacer acopio de cuanto aparecía en cualquier rincón del Real Jaén y organizarlo y archivarlo, pondrá fin a su particular colección este verano. «Lo voy a dejar un poco apartado, son muchas horas, hay que dedicarle mucho tiempo. Cada fin de semana me pegaba una pasada. Seguiré guardando cosas por si lo retomo algún día, recortaré noticias y guardaré material. Seguramente vuelva. Al final le tira a uno», admite, sin un motivo concreto para explicar por qué ahora. «La temporada que hemos tenido desilusiona un poco pero no es por nada en especial, más que nada por disfrutar de la familia. Si es cierto que me he sentido igual que muchos, un poco defraudado, y se ha acumulado todo. No es fácil dejarlo después de tantos años», apostilla.

Haciendo un poco de inventario tiene casi de todo lo que ha aparecido 'morado y blanco' en las últimas tres décadas. «Lo principal son los tomos, que he confeccionado recortando de los periódicos y la información que encontraba del equipo. Hace cinco años decidí organizarlos y hacer algo mayor y ya tengo siete archivadores grandes. Además guardo carteles de partidos, alineaciones de las que se reparten en el estadio, revistas, etcétera», enumera. Y además, 'merchandising' lagarto, pero no cualquiera. Original de los propios futbolistas, que le han regalado camisetas y prestado material de todo tipo para su colección.

Jugadores míticos

«A través de Facebook y las redes sociales localicé a jugadores como Chumila, Rueda, Nono, Sierra, Vicente Herrero, Manolo Herrero, Yepes, Domingo de Canarias y muchos otros, que no me quiero dejar, y les pedí fotos y todo lo que ellos tenían para escanearlo, fotocopiarlo o incluso originales cuando fuera posible. Sobre todo de los 90 que para mí fueron los mejores años. La respuesta fue increíble, no pensaba que me fuesen a hacer tanto caso. Me han ayudado mucho», recalca.

Así se ha hecho con zamarras históricas, como la de Gabi, que fue la primera, «la mítica de La General», o la de Roberto Valverde, «del año del ascenso con Tartilán», y muchas más: «Agustín Izquierdo, Rueda, Chumilla la de Segunda División A, la de Sierra, Guillén del año del ascenso con Gregorio Manzano.». Y también recientes, de René, Nando, Santi Villa, Quesada o la última, la de Fede, que se la ha dado antes de marcharse del Santo Reino. Y la lista no para de crecer: tiene prometidas las de Sutil o la de Juanma Espinosa.

Una pasión que empezó sin que el propio protagonista hallara una razón clara. «No lo sé, en serio. Era un chavalillo y me dije Jaén existe, no todo es Madrid y Barça y fui recopilando fotos, coleccionando cosas y me lo tomé cada vez más en serio. Fui enganchándome con los amigos a ir a los partidos y me costaba, porque soy de Villadompardo (ahora miembro de la peña de la localidad, aunque afincado en Torredonjimeno) y no tenía coche y me costaba ir a los partidos pero me las ingeniaba: con amigos, en coches de gente, como podía».

La década de los 90

Y la afición creció. Y no tiene pensado desprenderse de ella, ni siquiera de alguna pieza, salvo por bien del club o causa de fuerza mayor. Su favorito, «el tomo de los 90, al que le tengo más cariño. Tiene muchísimas fotos y grandes momentos como el de la Copa del Rey», subraya. Concuerda con sus primeros recuerdos de los blancos. «El ascenso de Manzano en 1990 y la época de Crispi. Ahí empezó la locura esta», asevera entre risas.

Su 'hobby' le ha reportado además cierta amistad con los jugadores, como con el meta René, apoyado además en su colaboración con Cope Jaén en tertulias a la que acude cada semana un futbolista blanco. «Me gusta más el fútbol a este nivel que el de élite. Para mí es mi familia lo primero, mi trabajo y luego el Real Jaén. Tú entras en mi casa y parece un museo», apunta.

Aunque su recopilación sufra un parón por la falta de tiempo, Águila seguirá apoyando al Real Jaén domingo tras domingo, seguramente desde preferencia aprovechando la oferta del club de 40 euros solo el carné, porque no le ha gustado la campaña de abonados, «no se premia una vez más a los socios del año anterior. En lo deportivo el entrenador tiene currículum, pero vamos a ver los jugadores que traen. Peor que el año pasado lo veo difícil», aventura.

Conforme avanza la conversación y los recuerdos se hacen nítidos en la retina ve más claro que esto es un punto y aparte y no uno final. «En un tiempo la retomaré seguramente». Como se destaca en El secreto de sus ojos, de Juan José Campanella: 'El tipo puede cambiar de todo: de cara, de casa, de familia, de novia, de religión, de dios. Pero hay una cosa que no puede cambiar, Benjamín. No puede cambiar de pasión'.

Por exagerada que pueda parecer o incomprensible para muchos, como lamenta Águila sobre su colección. «Desde fuera igual se ve algo raro, una locura; me dicen mucho que es muy 'friki'. Pero ¿quién no es 'friki' hoy en día de algo?», se pregunta.