«En tres años que llevo aquí es la primera vez que el público ha mostrado su descontento de esta forma», admitía ayer Óscar Quesada. El Real Jaén fue abucheado y silbado por parte de la afición el domingo, tras pinchar en casa ante la Hoya Lorca, pese a ser cuarto en la clasificación y firmar tablas. El jienense y el central cordobés José Cruz, indiscutible esta temporada para J. J. Aybar, dieron ayer la cara para analizar la actualidad del club y sobre todo el tenso ambiente que empieza a rodear al equipo merced a los últimos resultados (seis puntos de quince). «Sabemos que estamos en un club con mucha exigencia y hay que saber convivir con eso, los pitidos están dentro del trabajo del futbolista, tenemos que convertirlos en aplausos», indicó Cruz, que fue más lejos.
«Nos debemos a la afición. Estamos en un club de mucha exigencia para Segunda B. Somos el Madrid o el Barça de la categoría y tenemos que saber vivir con eso. El Real Jaén, el Cádiz y el Cartagena estamos llamados a estar arriba y tenemos la presión que ellos en Primera de estar arriba. Tenemos la exigencia de ganar. Debemos empezar a ganar y sobre todo hacernos fuertes en casa con nuestra afición», expresó el zaguero, que se destapó como central la pasada segunda vuelta, donde prefiere jugar antes que en el lateral derecho.
Cruz incluso apuntó que «la presión nos gusta a los futbolistas, eso significa que estás en un equipo con mucha exigencia. Claro que nos gustaría tener aplausos porque significaría que estamos jugando bien y arriba. Los jugadores que estábamos el año pasado y antes sabíamos que el objetivo es el ascenso. Esa presión al futbolista le gusta».
Quesada, «totalmente recuperado de los problemas musculares, entrenando con normalidad desde mediados de la semana pasada», también analizó los pitidos. «Sabemos que es algo normal, igual que la afición somos muy exigentes con nosotros mismos y el domingo no estuvimos todo lo bien que podíamos haber estado. Esto acaba de empezar y somos los primeros que queremos ganar todos los partidos y estar primeros. Somos los más fastidiados por el resultado del domingo, pero lo único que podemos hacer para cambiar los pitidos por aplausos como hemos tenido hasta ahora es trabajar duro, convencidos de que estamos en camino de hacer buenos partidos, jugar bien al fútbol y lograr muchas victorias», sentencia el de Orcera, que apostilla que «los tomamos con naturalidad, en otros sitios hemos vivido estos momentos y en todos los equipos hay altibajos. Hay jugadores que vienen de otros equipos con mucha exigencia, como Fran Miranda habiendo jugado en Segunda».
Cuerpo técnico y plantilla han analizado el partido del domingo, con un pésimo retorno del vestuario. «Sabemos que no empezamos bien la segunda parte pero hay que tener en cuenta que el equipo contrario iba perdiendo, arriesgan más y nos presionaron y no estuvimos bien. Una vez que nos marcaron el gol volvimos a atacar y ellos a jugar más a la contra, pero es el fútbol lo que te lleva a eso», explica Quesada al respecto.